El fin de semana del 16-17 de mayo aparecimos guiados por unos amigos en Susin. Un pueblo perdido en las montañas de Sobrepuerto, allí conocimos a Angelines una fascinante mujer que no se cansa de luchar por la supervivencia del pueblo.
Comenzamos el fin de semana con una comida al aire libre, y por la tarde partimos rumbo a un pueblo abandonado llamado Ainielle, protagonista del libro "la lluvia amarilla". Resulta curioso descubrir las casas medio derruidas, el molino, la iglesia con su libro de firmas y dedicatorias variopintas, por supuesto dejamos la nuestra, jeje.
A la vuelta a Susín, cenamos en casa de Angelines, en la cadiera, donde nos hicimos unas pataticas asadas y compartimos nuestras experiencias e inquietudes.
A la mañana siguiente nos dedicamos a recoger leña, de los alrededores del pueblo. Y por la tarde pudimos disfrutar de una siesta en los prados floridos y ya tuvimos que bajar a Zaragoza, vuelta a la realidad.
A la vuelta a Susín, cenamos en casa de Angelines, en la cadiera, donde nos hicimos unas pataticas asadas y compartimos nuestras experiencias e inquietudes.
A la mañana siguiente nos dedicamos a recoger leña, de los alrededores del pueblo. Y por la tarde pudimos disfrutar de una siesta en los prados floridos y ya tuvimos que bajar a Zaragoza, vuelta a la realidad.
Gracias a Titin y Paola por llevarnos a este lugar,
a Pili y Mery por acompañarnos
y a Angelines por acogernos en su casa.
Un abrazo a todos,
Rafa y Mariajo
No hay comentarios:
Publicar un comentario